FOTO

Me gusta escribir sobre fotografías: descubrir lo que ocultan, representan y captan. El fotoperiodismo es apasionante, a la hora de efectuarlo y de escribir sobre él.









Fue elegida entre 1500 fotografías como la FOTO DEL AÑO. Es de la Belga Alice Smeets y retrata la pobreza de un barrio de Puerto Príncipe, Haití.
La Unicef la premió. El entorno: con barro, animales y desperdicios, rodea la silueta de una niña enfundada en un vestido blanco. El contraste de un mundo olvidado, relegado, despreciado. La ilusión -pura- de una niña y su desafío por ser y vivir en medio de la nada; donde todo es paupérrimo, amenaza natural y necesidades.
Entre el lodazal (con aguas contamidas), el orgullo -así lo dice Smeets- mueve a los nativos: "no poseen otra cosa", afirma Alice.
Aquí está la imagen: la niña y su mundo.
Para reflexionar y comparar, como también preguntarnos por qué ocurren ciertos hechos, y cómo unos se relacionan con otros, o son consecuencia u su origen,
Hay explicaciones para todo.
La falta de ética, de educación, de interés, de escrúpulos, de una mejor distribución de los bienes, de amor, de solidaridad, de eficiencia...son parte de la respuesta.
Otra foto, hoy, en los diarios, en la televisión y en la Web planetaria, da cuenta del retiro de un monumento de Francisco Franco, en España. El reconocimiento de los actos de corrupción (coimas) en varios países -funcionarios-, por parte de la empresa SIEMENS, por otro lado, patentizan dos de los episodios de la sinrazón en que se debate la humanidad.
Las consencuencias saltan a la vista.
Del homenaje a un caudillo cuestionado y culpable de violaciones a los derechos humanos, queda el deplazamiento de su figura y un saldo histórico -atroz- que es revisado, actualmente, en la península ibérica.
De Siemens y el reparto de dinero para ganar -comprar- negocios, ni hablar, aunque ahora sostengan que no volverá a suceder y harán una depuración e inversiones limpias...
Vinculando ambas noticias con esta fotografía (un instante real, paralizado, captado por la cámara de Alice), se desprende el siguiente pensamiento..., al menos a mí me surge:
¡Cómo los hombres y sus acciones producen hechos evitables, negativos, que horrorizan y terminan por ocasionar muerte o más pobreza, cuando con otra actitud y principios morales, todo lo contrario hubiera podido ser!.